miércoles, 14 de abril de 2010

Quijotes del Vístula

(No, no vamos a hablar de la carga contra los panzer)


Si hay una historia triste en la Segunda Guerra Mundial –y hay muy pocas de otro tipo en la Segunda Guerra Mundial–, esa es la de los polacos. Incluso para una nación acostumbrada a ser desmembrada y vuelta a armar cada dos o tres generaciones, la historia de Polonia entre 1939 y 1948 alcanza cotas de tragedia varios grados de magnitud por encima de la media.